Salomón Villada, un joven talentoso de Medellín, soñaba con alcanzar la fama en la música. Con el apoyo incondicional de un equipo de personas que creyeron en su potencial, comenzó su carrera como Feid. Este grupo dedicó tiempo, esfuerzo y recursos para construir su imagen y lanzarlo al estrellato.
Sin embargo, al firmar con Universal Music, Salomón traicionó a quienes lo apoyaron desde el principio. Cambió su nombre a Ferxxo en un intento de borrar su pasado y romper los lazos de lealtad que lo habían llevado al éxito.
Te hacés el calle, pero no sabés de lealtad.
Te hacés el perfecto, pero te conocemos por dentro.
El que perdió la memoria; el que deshonra la palabra, el puño y la letra.
Muchos de los grandes momentos de la humanidad han sido producto de un pacto de caballeros, de un apretón de manos o de empeñar la palabra como uno de los actos más solemnes y verdaderos.
La amistad y los negocios entre conocidos se basa en eso mismo porque cuando todos trabajan por un mismo fin y enfocados en un mismo sueño; la palabra, la confianza y la lealtad son siempre la base.
Y es que los sueños no se construyen solos, en especial si necesitamos de los demás para cumplirlos y este es el caso de Salomón, Rayo, Feid y Ferxxo que, si usted no lo sabe, terminan siendo la misma persona y con los mismos pecados.
Claro que conocemos al artista famoso que brilla en el escenario, pero ¿conocemos al verdadero rostro detrás del éxito?
La historia se remonta al año 2013 en Medellín, Colombia, cuando un muchachito de clase media y talentoso tiene como sueño ser famoso y que su música la conozca el mundo entero.
Pero solo no podía y gracias al buen ojo de Juan Pablo Piedrahita, socio y manager de Infinity Music, tour manager de J Balvin e inversionista; Caribe School, el exitoso negocio de excursiones de grado 11 en Colombia de Carlos Ramírez y el apoyo incondicional al equipo del empresario de eventos e inversionistas Darío Villa, Salomón Villada Hoyos deja de ser un simple compositor y empieza a forjar su historia como artista.
Más adelante al equipo llegan los inversionistas Jhon Cardona e Iván Cataño para inyectarle el capital necesario para cumplir el sueño al que todos le estaban apostando: que este muchachito pudiera dar a conocer su talento y llegar a ser fichado por alguna de las grandes disqueras del mundo.
Este nuevo artista recibió la mano amiga de inversionistas que creyeron en él. Le brindaron no solo respaldo financiero, sino también su tiempo y esfuerzo para impulsar su carrera. Se convirtieron en una familia.
De la mano de Juan Pablo, Carlos, Iván, Jhon y Darío nació la marca Feid y así quedó registrada legalmente y en la piel de estos soñadores, una marca inspirada por Salomón pero que entre todos forjaron con el objetivo de darlo a conocer: de Colombia para el mundo.
Pero a medida que la fama lo envolvía, la máscara del éxito comenzó a develar su verdadero rostro o mejor a desdibujarlo pasando de Feid a Ferxxo. La gratitud y la lealtad se desvanecieron, reemplazadas por la arrogancia de un personaje inalcanzable.
La promesa de gratitud se desvaneció ante la vanidad de una figura creada para el público, mientras el artista olvidaba su verdadera identidad.
Una de las grandes, Universal Music, pone sus ojos en Feid y ya conocemos lo que sucede cuando los grandes monopolios se enamoran de un objetivo (el artista) no descansan hasta tenerlo en sus redes sin importar lo que cueste o la sangre que corra.
Y así fue como sin llegar a ningún acuerdo, Feid hizo a un lado a quienes desde el inicio creyeron en él y lo hicieron famoso dentro de la juventud colombiana para cumplir en solitario sus más profundos anhelos y permitirse ser uno más de una gran lista de artistas de la disquera.
Y como en la historia siempre pasa, el pulpo llegó a cantarle al oído a Salomón, –en ese momento Feid–, que no encontró mejor manera de borrar su pasado que hacerse llamar Ferxxo, como una de sus estrategias para faltonear a sus mentores.
Como en las peores historias de delincuentes que borran su pasado como si el pecado solo respondiera a un nombre. De Feid a Ferxxo. Lo que nunca tuvo en cuenta es que llámese como se llame, la traición se mantiene viva.
En el olvido quedaron aquellas palabras de Feid que le repetía constantemente a sus mentores reconociéndoles que ellos lo habían formado, que ellos habían invertido y que estaba donde estaba, gracias a esa gran apuesta de todo el equipo.
Salomón, o Feid o Ferxxo, como lo quieran llamar, convenció a todo su equipo de dejarlo en libertad contractual a cambio de firmarles un documento con su puño y letra que salvaguardara la inversión de todos y estipulando unos porcentajes.
Esa libertad era la única condición que Universal le había puesto al artista y así, confiando en la palabra de Feid parece repetirse la historia de uno de los momentos más icónicos en la historia de la música cuando se formó la banda The Beatles.
En 1960 en Hamburgo, Alemania, los miembros fundadores del grupo John Lenon, Pau McCartney, George Harrison y Stuart Sutcliffe, realizaron un acuerdo informal en una servilleta de papel en el que establecieron las bases de la banda y la repartición de las ganancias. Aunque no era un contrato formal, este acuerdo en una servilleta marcó el inicio de una de las bandas más influyentes de la historia de la música.
De esa misma manera Feid el 9 de junio de 2016 le firmó a su equipo en una hoja de cuaderno en el restaurante Mistura en Provenza, Medellín, un acuerdo de compensación por los años de trabajo e inversión para él poder continuar su camino como artista.
Pero rápido se le olvidaron a Feid las promesas porque una vez consiguió liberarse de quienes habían apostado por sus sueños y habían invertido en él, nunca más volvió a pasar al teléfono; se deslumbró por su vida en Miami, carro, casa y novia nueva y los amigos y sus mentores quedaron en el olvido.
Ultrajados, atropellados y hasta robados; así terminó el equipo de trabajo de Feid. La historia casi siempre es la misma; un grupo de amigos o inversionistas que de corazón le apuestan a un proyecto, siempre terminan pisoteados por los grandes que después de ver el trabajo realizado se apoderan de la presa para explotarla en lo mejor de sus carreras.
Feid abusó de la buena voluntad de su equipo, de creer en un mismo sueño y cuando se hizo realidad ese sueño, el artista lo disfrutó solo porque su palabra y compromiso no le alcanzó para su equipo.
La fe implica confiar en algo o alguien más allá de lo que se pueda ver o entender.
Fe le puso su equipo y Salomón los defraudó. Hoy posa por el mundo de la mano de su novia como un artista de la calle, y de calle no tiene nada porque si algo tiene la calle, la verdadera calle es palabra y Feid, así como suena, carece de ella.
Solo el tiempo y la lucha sin descanso le dará el reconocimiento a quienes fueron quedando abandonados por Feid, solo el tiempo demostrará que Salomón o Feid o ahora Ferxxo solo se dejó deslumbrar por el pulpo de Universal y muy rápido olvidó a quienes un día decidieron darle la mano para que cumpliera su sueño de ser artista.
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